1º ESO

BLOQUE 2: LA VOZ, INSTRUMENTO PERFECTO




La voz es la herramienta más desarrollada que tenemos para comunicarnos. Existen infinidad de códigos que podemos usar para explotar todas sus posibilidades. 

En este tema, estudiamos una de sus vertientes, una que ha estado presente desde el comienzo de la humanidad: la expresión artística, el canto.

1. APARATOS QUE INTERVIENTEN EN LA PRODUCCIÓN DE LA VOZ.

Pues, además del aparato fonador (el que produce sonido), tenemos involucrados el aparato respiratorio y el resonador. 

Un aparato es un conjunto de órganos y tejidos que cumplen con una función concreta. Un mismo órgano puede formar parte de varios aparatos, por ejemplo, la mandíbula inferior cuyo papel principal es masticar y deglutir el alimento, pero también sirve para articular el sonido cuando vibran las cuerdas vocales. 

Por otro lado, el aparato fonador es el que propiamente produce el sonido en nuestro cuerpo a través de las cuerdas vocales. El aparato resonador está formado por las cavidades y huesos que resuenan y vibran en nuestro cuerpo para dar forma y color a nuestra voz, que es única e irrepetible. 

2. EL APARATO FONADOR

El aparato fonador está formado por la laringe y las cuerdas vocales. 

La laringe es una parte de nuestro cuerpo situada en nuestro cuello que protege las cuerdas vocales y los conductos que por ahí pasan. Es una estructura formada por huesos y cartílagos. Podemos notar nuestra laringe cuando tragamos porque tiene una protuberancia que sube y baja.

Las cuerdas vocales están formadas por dos pares de fibras musculares. Aunque realmente son tejidos recubiertos de fibra de músculo. Cuando hacemos que se junten, se ponen a vibrar por el aire que pasa entre las dos, que las activa. 

Que sean más gruesas o finas, largas o cortas, influye en la tesitura de nuestra voz, haciendo que tengamos la voz más aguda o más grave.

3. EL APARATO RESONADOR

El aparato resonador está formado por huesos, cartílagos y todas aquellas cavidades que genera nuestro esqueleto de forma natural. Por ejemplo: el tórax es una cavidad que vibra cuando hablamos o cantamos. 

El aparato resonador sirve para amplificar y articular el sonido.

En este apartado tenemos que clasificar los elementos del aparato fonador en dos tipos: fijos (que amplifican) y móviles (que articulan)

Los fijos son los que no podemos modificar, como el cráneo, el tórax, los senos frontales o maxilares y sirven para dar mayor intensidad a la onda sonora que producen las cuerdas vocales. Así, podemos emitir sonidos a mayor distancia, por ejemplo.

Los móviles son aquellos que ayudan a articular, es decir, nos permiten modificar el sonido de forma que podamos construir un lenguaje a través de fonemas.

Los labios, la mandíbula inferior, la lengua, los dientes, el velo del paladar, son elementos del aparato resonador que al moverse ayudan a pronunciar las palabras de forma que, su correcta utilización permite a los cantantes proyectar la voz de forma más clara y con más potencia.


4. TIPOS DE RESPIRACIÓN


En general, hay tres tipos de respiración: la clavicular, la pulmonar y la diafragmática. La más aconsejable para cantar es la diafragmática, pero vamos a ver cómo funcionan las demás.

  • Respiración clavicular: se realiza de forma habitual. Se llama así porque las clavículas se elevan al inspirar.
  • Respiración pulmonar: en este tipo de respiración, la caja torácica se ensancha y sube la parte del pecho.
  • Respiración diafragmática: es la que utilizamos de manera inconsciente cuando dormimos. El diafragma se ensancha y permite que los pulmones se llenen en su totalidad. Es la más aconsejable cuando cantamos. Necesita menos energía.

Cuando los cantantes quieren proyectar la voz, utilizan la respiración diafragmática e impulsan el aire ayudándose de los músculos abdominales, lumbares e intercostales. 

5. ¿QUÉ ES EL "BEL CANTO"?

El "bel canto" es una técnica vocal (que se utiliza para cantar) que consiste en desarrollar todos los elementos expresivos de la voz como el trino, el virtuosismo, la proyección en grandes salas, la brillantez y el dominio de la respiración.

Esta técnica pretende ayudar a los cantantes a mantener la expresividad de sus voces y al mismo tiempo hacer que se integren en la masa instrumental de la orquesta sinfónica.

Se cree que el "Bel Canto" nació en el siglo XVIII (dieciocho), pero realmente se tienen testimonios desde el siglo anterior. Lo que sí que es cierto es que se ha desarrollado hasta la actualidad, siendo el eje vertebral de todas las producciones operísticas.

De esta técnica es de la que se desprenden el resto de técnicas vocales más utilizadas en el ámbito musical, tanto en el panorama clásico como en la música urbana.